Una alianza de casi cinco décadas para el suministro de gases industriales

Messer se estableció en Tarragona a principios de los años 70. Desde entonces ha crecido junto con sus clientes, las grandes compañías químicas y petroquímicas que se instalaron en la zona, a quienes les suministra gases industriales mediante gaseoductos propios de más de 90 km, una red de tuberías que entrelaza sus plantas de producción de gases y se conecta con los consumidores en los polígonos norte y sur.

Messer Ibérica, filial española de la mayor empresa familiar de gases industriales a nivel mundial, la alemana Messer, cuenta con buena parte de sus instalaciones ubicadas en el parque químico de Tarragona, el mayor del sur de Europa. Gracias a un suministro fiable y sin interrupciones durante ya casi 50 años, ha formado fuertes alianzas con las grandes compañías del clúster químico de Tarragona, que se reflejan en las últimas renovaciones y ampliación de importantes contratos adaptándose a las nuevas necesidades de sus clientes. La compañía está trabajando en importantes proyectos para el futuro de la compañía, tanto en el ámbito local como el nacional.

Su infraestructura de producción y distribución, así como su fuerte orientación al cliente, le permiten ofrecer un servicio integral de gases. Entre otros servicios, pueden mencionarse las inertizaciones en paradas o la ingeniería de procesos para mejorar la eficiencia en la producción de las plantas de sus clientes mediante soluciones que ayudan a reducir costes y que son ambientalmente sostenibles.

Las funciones de los dos productos principales -el nitrógeno y el oxígeno- que produce en sus plantas de fraccionamiento de aire y suministra vía gaseoducto son, muy resumidas, las siguientes:

• Prevenir reacciones no deseadas y aportar seguridad a las instalaciones (N2).
• Servir de materia prima en procesos de oxidación y proteger el medio ambiente (O2).

El nitrógeno, clave para Repsol

El nitrógeno es indispensable, por ejemplo, en la refinería de Repsol, ya que las sustancias inflamables allí son omnipresentes. Por lo tanto, debe evitarse el contacto de los vapores de aceites y combustibles o de productos gaseosos como el propano y el butano con el aire.

En el funcionamiento de las plantas, las columnas de gran altura y las tuberías están herméticamente selladas contra el aire exterior. Si las plantas tienen que ser abiertas para el mantenimiento, primero se purgan con nitrógeno. Por un lado, el gas inerte desplaza los vapores inflamables de los componentes de la planta; por el otro, la presencia del nitrógeno excluye una reacción de combustión. Durante las grandes revisiones del conjunto de la planta se requieren enormes cantidades de nitrógeno para esta tarea en zonas donde no hay conexión con el gaseoducto y, por tanto, se suministra el N2 mediante camiones cisterna con equipos de evaporación móviles.

En el funcionamiento normal, este gas se utiliza constantemente. Ejemplo de ello es el blanketing, en el cual el nitrógeno llena los cabezales de los tanques de almacenamiento. Se coloca como una manta sobre el nivel del líquido, de modo que no puede surgir ninguna mezcla explosiva de hidrocarburos-aire.

Por su parte, el oxígeno es utilizado como materia prima en procesos de oxidación; por ejemplo, en la producción de oxido de etileno. Otro ejemplo sería su aplicación para la desulfuración en productos del petróleo donde se extrae el azufre mediante el proceso de hidrodesulfuración y se trata posteriormente en el proceso Claus. En una reacción de múltiples etapas, se convierte primero en sulfuro de hidrógeno y finalmente se separa como azufre elemental por medio del oxígeno.

Por otro lado, el oxígeno se utiliza en el tratamiento de aguas residuales de diversas empresas del polígono. Con la inyección de oxígeno en lugar de aire, se puede aumentar la capacidad de las depuradoras y mejorar la calidad del tratamiento de estas aguas.